Realmente, su origen aún resulta incierto, sin embargo, especialistas sitúan la raíz de la palabra en el latín “autumnus” que significa que “llega la plenitud del año”, a su vez, emana de observar que la vegetación ya está al final de su ciclo; esta temporada comienza con el equinoccio de otoño, que en el hemisferio norte es el 23 de septiembre y en el hemisferio sur el 23 de marzo y termina en el solsticio de invierno.
Título: La vendimia o El Otoño
Autor: Francisco de Goya y Lucientes
Fecha: 1786
Fuente: Museo del Prado
Esta estación, suele tener una duración en promedio de 83 días, aunque actualmente, con los cambios en las condiciones climáticas que azotan al planeta, los tiempos varían, debido al calentamiento global ha hecho que las características meteorológicas del periodo se adelanten o atrasen durante los meses de septiembre, octubre y noviembre.
El otoño no dura mucho en las regiones polares, porque en esas zonas el invierno suele aparecer antes, y en las regiones tropicales, el otoño no suele provocar cambios muy notables más allá de los amaneceres y atardeceres a más tempranas horas en el día. La temporada otoñal provoca el descenso de las temperaturas y el cambio de color en los paisajes, que de verdes se tornan rojizos y amarillentos, algunos árboles incluso pierden el follaje debido a que los fuertes vientos tiran las hojas secas que los cubren.
Así mismo, la palabra otoño también hace referencia a la segunda hierba o heno que producen los prados en la estación. El término otoñada hace referencia a una abundancia de la tierra, ya que la estación es la época de cosechas y recolección de algunos productos como el maíz y los pastos tienen una mayor fertilidad.
Dirección de los rayos solares durante el equinoccio de otoño.